Cane Corso
Vendido
(Canis lupus familiaris)
1200 € iva incluido
El Mastín Italiano o Cane Corso es un perro excepcional, equilibrado y apacible, pero no es adecuado para todo el mundo. Si has decidido tener uno solo por su aspecto físico, te recomendamos que estudies un poco la raza y te asegures de que el perro es perfecto para ti. Su fuerte instinto le convierte en un gran perro guardián ya que, de hecho, esta es su función principal. Es un gran protector de su familia.
- Machos: 7
- Hembras: 5
- Fecha de nacimiernto: 21/02/2022
Es un perro acostumbrado a tomar decisiones por sí mismo, que necesita pensar y está siempre dispuesto a complacer a su dueño. Es muy inteligente, pero no destaca en obediencia, ya que su función no está relacionada con obedecer órdenes al instante.
El Cane Corso es un perro que protege fieramente a su familia. Es muy leal, pero no suele ser amable con los extraños. Además, necesita un entrenamiento constante, con ejercicio físico y estimulación mental. Se trata de un perro de trabajo, que necesita tener algo que hacer. De lo contrario, buscará la manera de entretenerse y esto se traduce en comportamientos que no siempre serán aceptables.
Tener en cuenta también que la raza ha sido desarrollada para vigilar las propiedades de sus dueños y para la caza mayor, de jabalí y otros animales. Por ello, se trata de una raza potente y atlética, que necesita un dueño con experiencia y capacidad de liderazgo.
El Mastín Italiano puede medir entre 62 y 70 centímetros a la cruz, en el caso de los machos. Las hembras miden entre 58 y 66 centímetros.
Su peso varía entre 41 y 55 kilos y su esperanza de vida es de 10-12 años.
Su enorme tamaño hace que resulte complicado tenerlo en un piso.
Es cariñoso, amable, paciente y muy leal con los suyos, pero puede ser agresivo con los extraños. Por lo general, no le interesan ni las personas ni los animales que no pertenezcan a su familia.
Se trata de un perro trabajador, que necesita tener algo que hacer. De lo contrario, buscará entretenimiento y esto se traduce en actividades destructivas.
Es un perro independiente, acostumbrado a tomar decisiones por sí mismo. No se trata de una raza que destaque en obediencia. De hecho, puede resultar desafiante y testarudo.
Generalmente es un perro tranquilo, pero necesita estar bien adiestrado y convenientemente socializado.
Se comunica a través de resoplidos, ladridos y otras verbalizaciones.
No es un perro adecuado para un dueño primerizo y tampoco para alguien que no tenga un carácter firme y sepa mantener el liderazgo, sin dejar de mostrarse cariñoso con él. El Cane Corso disputará tu jerarquía si ve que puede hacerlo.
El Cane Corso tiene un fuerte temperamento. Bien adiestrado es un excelente perro de familia, tranquilo y amable, pero si no tiene un buen dueño, puede convertirse en un perro agresivo y peligroso.
Es muy inteligente, pero le gusta tomar sus propias decisiones. Por ello, resulta difícil de adiestrar, aunque posee un fuerte instinto para realizar sus funciones con gran eficiencia.
Ser firme con el perro no significa castigarlo o tener un comportamiento agresivo con él. De hecho, se trata de un perro muy sensible. El Mastín Italiano fue desarrollado para trabajar soportando altos niveles de estrés. Por ello, debe mantener su temperamento en estas condiciones. De lo contrario, significa que no está bien adiestrado y que no mantiene el comportamiento esperado en la raza.
De 10 a 12 años
Alimenta a tu Mastín Italiano o Cane Corso con comida de alta calidad adecuada a sus características. Evita el sobrepeso, ya que ocasionará problemas de salud a tu perro. Asimismo, procura alimentarlo con raciones pequeñas varias veces al día para minimizar el riesgo de torsión. Es importante también que disponga de agua fresca y limpia. Si no te encuentras en casa para darle la comida porcionada, puedes adquirir un comedero automático para perros. Este se encarga de ofrecer a tu perro solo la cantidad de comida necesaria tantas veces como quieras.
El Mastín Italiano o Cane Corso es cariñoso y protector con los niños de su propia familia, sobre todo si se ha criado con ellos. Sin embargo, es importante que supervises sus interacciones, ya que se trata de un perro de gran tamaño y podría hacerles daño, aunque no sea intencionadamente.
También has de tener cuidado cuando vayan otros niños a tu casa y enseñarles a no gritar ni emitir sonidos agudos en su presencia. El perro podría confundirlos con señales de agresión y actuar en consecuencia.
Los niños deberán aprender a no correr en presencia del perro, pues este podría excitarse y perseguirles. Correr y chillar puede hacer que el Corso asocie a los niños con una presa y esto disparará su instinto.
Antes de morder, los perros suelen mostrar su molestia con un aviso, por eso es muy importante que los niños aprendan a interpretar correctamente sus señales. Los niños no deberían acercarse al perro mientras está comiendo o durmiendo y mucho menos quitarle la comida. Sobre todo, si no pertenecen a la familia.
Enseña a tus hijos y sus amigos cómo deben acercarse al perro y tocarlo, y a no molestarle si este envía una señal de advertencia. Generalmente, un perro bien adiestrado no muerde a no ser que todos sus avisos previos hayan sido ignorados.
En cuanto a otros perros y animales, se llevan bien con perros y gatos cuando se crían con ellos. Si se conocen siendo adultos, es posible que necesiten un período de adaptación. Si los animales no pertenecen a su hogar, puede considerarlos una presa, perseguirlos y matarlos. Es importante que tengas cuidado con los animales de los vecinos y si lo dejas solo en casa, trata de mantenerlos separados cuando te vayas. Si vas a tener dos perros, ya sea otro Corso o de otra raza, es mejor que sean de sexos opuestos. Si bien no es imposible hacer que dos machos se lleve bien, la posibilidad de conflictos es mucho mayor.